Es importante saber que el arte
se ha situado siempre entre la expresión y la comunicación. A lo largo de los
siglos, según los distintos estilos y percepciones personales, su función
comunicadora ha variado en importancia, pero, desde luego, una obra de arte sin
destinatarios pierde totalmente su esencia.
Si queremos mencionar una concepción
del arte, podemos destacar que en algunas épocas antiguas se definió el arte
como la representación de la belleza, la perfección y la armonía. Esta definición
quedó totalmente desfasada con el paso de los siglos y muy especialmente tras
la aparición de las vanguardias, que plantearon nuevos caminos de expresión y
modificaron los paradigmas de la creación artística.
En nuestros días conviven muchas concepciones
del arte en sus inagotables manifestaciones, pero casi todas coinciden en la
esencia comunicadora del mismo, pues la
obra creada carece de sentido sin la percepción del receptor, quien descodifica
e interpreta, desde el raciocinio, la emoción o cualquier expresión artística
dontándola de auténtico significado.
Los artistas expresan pensamientos,
criterios, sentimientos y emociones a través de su arte, los cuales llegan a los
receptores, al público, quienes los hacen suyos mediante ese proceso de comunicación.
Así, los elementos principales de
toda comunicación (emisor, receptor y mensaje) quedan perfectamente
establecidos, también el canal, que depende del tipo de arte en cuestión:
auditivo para la música, audiovisual para el cine, visual para la pintura, las interferencias
las cuales dificultan la perfecta
transmisión y percepción de los mensajes.
Muchas manifestaciones artísticas
de reciente aparición como el cómic, la fotografía, el arte urbano, el rap, el cine y las artes
escénicas por ejemplo, han dado un paso más y se consideran en ocasiones
verdaderos canales de comunicación que no sólo despiertan sentimientos, sino
que transmiten ideas, opiniones y tomas des postura. Denuncian, manifiestan y
aportan un modo distintivo de contar la realidad, de aproximarla a los demás,
de interactuar con ellos.
Podríamos decir que el arte
emplea la revolución tecnológica del siglo XX según dos aspectos. El primero
sería el tecnológico, que es el circuito
de comunicación que se establece entre el autor y el público que reside la obre
es modificado a partir de la selección que el autor hace del medio tecnológico
que utilizará para transmitir su mensaje. La fotografía, el cine, el vídeo y la
informática como medios de comunicación y como expresión creativa propusieron
un nuevo lenguaje artístico con códigos propios.
Estas propuestas rompieron con la idea de la obra única,
propia de la pintura, la escultura tradicional o del grabado y el empleo por
parte de los artistas de nuevos soportes técnicos permitió la producción de
objetos multiplicados e idénticos entre sí.
En lo que se refiere al aspecto
democrático y de consumo, los medios de comunicación permiten extender el arte
hacia las masas y hacia las capas sociales a las que le sean inaccesibles
ciertas producciones artísticas. La democratización de los medios tecnológicos
supone una socialización del arte, se
constituye la noción de un arte para todos, en el que el espacio privado
tradicional se convierte en un espacio público pero esta democratización no
garantiza su difusión, esto depende de las condiciones económicas del sistema
donde la obra se produce y se comunica.
La posibilidad de utilizar los
medios de comunicación impulsa al artista replantearse una nueva relación entre
el objeto de arte y su recepción por parte del público, ya que se modifica el
modo de transmitir el mensaje artístico y su lenguaje.
En conclusión podemos decir que
los medios de comunicación y los avances tecnológicos han venido a impulsar la
propagación del arte, facilitando todo el material artístico que despierte
interés en las personas , así como también facilita a los artistas poder dar a
conocer sus trabajos a través de los medios de comunicación que llegan a las masas
de población facilitando la transición de ideas, pensamiento, críticas,
reflexiones y todo tipo de sentimientos aun a personas que no pueden asistir a
una exposición.
Como dijo Albert Einstein < El espíritu humano debe prevalecer sobre la tecnología.>